domingo, 22 de febrero de 2009

Léolo.

El niño que nació de un tomate.

"No intento recordar las cosas que ocurren en los libros. Lo único que le pido a un libro es que me inspire energía y valor, que me diga que hay más vida de la que puedo abarcar, que me recuerde la urgencia de actuar."

"Mi abuela había convencido a mi padre que la salud florece al cagar."

"Dejé de ver el rosa, un rosa sucio, un rosa muerto. Ya no siento mi carne, ya no estoy en ella."

"Ese día entendí que el miedo habitaba en lo más profundo de nosotros mismos, y que una montaña de músculos o un millar de soldados no podrían cambiar nada."

"PORQUE SUEÑO, YO NO LO ESTOY.
Porque sueño, sueño.
Porque me abandono por las noches a mis sueños antes de que me deje el día.
Porque no amo.
Porque me asusta amar.
Ya no sueño, ya no sueño."

Desayuno con diamantes.

Hoy me pudo la perrería, y no acudí a una cita que era, cuando menos, curiosa. El evento toma el nombre de Desayuno con viandantes. Consiste en una quedada en algún lugar de Valencia, y como única condición para participar es llevar tu desayuno para compartir, tu taza, y ganas de conocer gente que, como tú, también sentía la curiosidad por participar en algo tan original en mitad de la calle.

Para compensar mi no asistencia a este particular desayuno colectivo, me vi por la tarde la película ganadora del Oscar a la mejor banda sonora con Moon River en el 61. Por cierto, sale una tal Audrey Hepburn...

martes, 3 de febrero de 2009


YO TAMBIÉN SOY OPOSITORA